Mi historia
Comencé mi primer proyecto de emprendimiento online desde cero en 2019, hace 6 años, mientras estaba en la universidad terminando el trabajo de fin de carrera.
Ayudé a más de 500 alumnos con mi programa de entrenamiento y psicología. Les ayudé a gestionar sus pensamientos y emociones negativas y a ayudarse a sí mismos en los momentos difíciles para que pudieran por fin, no solo ponerse en forma y verse bien físicamente, sino también superarse en todas las áreas de su vida, incluso, muchos de ellos me pidieron que les ayudara también a iniciar sus propios proyectos de emprendimiento para que pudieran vivir de ello igual que yo lo hacía
Después, comencé una nueva etapa, fui madre, pero sin apoyo, con una pareja que no me sostenía emocionalmente. No tenía tiempo para mis proyectos personales, no podía dormir por las noches, estaba 24h al día con mi cuerpo estresado y en alerta, pasaba mucho tiempo encerrada en casa atendiendo a las demandas de mi hija mientras me sentía mal por no poder hacer todo lo que me gustaba: grabar contenido, bailar, sociabilizar, crecer mi proyecto... mientras recibía el reclamo y enfados de mi pareja por tener la casa desordenada y no estar contribuyendo con la mitad de la economía de la casa.
Estaba tan saturada emocionalmente que cualquier intento de hacer ejercicio o limpiar, me suponía un esfuerzo enorme. Mi pareja me decía "pero si no es tan difícil ¿por qué no puedes hacerlo?" No entendía qué me pasaba si yo era la "chica fitness productiva", pero mi mente estaba saturada y bloqueada y caía en estados de pereza y apatía.
Al no tener tiempo y caer en agotamiento, dudas, miedos y falta de fe y apoyo, no pude seguir sosteniéndolo y ocurrió lo que más miedo me daba: quedarme con cero clientes, cero ingresos y una deuda de 3.000 euros que me prestó mi pareja para invertir en mentores.

La buena noticia es que después de tocar fondo, ya solo podía ir hacia arriba. Como siempre he tenido un afán de superación, me puse a investigar por qué me estaba pasando eso y cuáles eran los patrones inconscientes que me impedían prosperar.
Usé los problemas que estaba teniendo como ESPEJO para ver qué era lo que tenía que sanar dentro de mi. Fui haciendo consciente cada patrón. Cada desafío se convertía en una revelación.
2024 fue un año de "dejar ir" patrones inconscientes, emociones dolorosas y también seres queridos que dejaron este mundo. Comencé a trabajar de empleada para poder pasarle a mi pareja la mitad de los gastos familiares. De manera paralela, la vida me empezó a traer regalos preciosos en forma de nuevos proyectos, nuevas amistades sinceras, con mucho amor y mucha verdad, nuevas experiencias y nuevas alumnas a las que ayudar (como si quisiese compensar para que el dolor no fuese tanto) (como si me dijese, lo estás haciendo bien, lo viejo se está yendo y lo nuevo está llegando)
Ese año, 2024 arranqué "desde cero" una versión renovada de mi programa Neuroreset y ahora cuento con un equipo de 5 mentores que me acompañan en esta misión.
Ahora, me dedico a ayudar a otras mujeres con historias similares: mujeres agotadas por sus relaciones desgastantes (hijos, pareja, familia, trabajo...) para que se liberen de todos los lastres que le impiden prosperar y, no solo se recuperen, sino que se superen y conecten con la mejor versión de si mismas que hayan sido jamás


